RESUMEN:
Un libro no tenía nada que contar, se preguntaba y pensaba que era lo que podía mostrar a sus lectores pero no se le ocurría nada.
Un día su escritor decidió echarlo a volar, ya que para poder contar algo se tiene que vivir.
El libro se enfrentó a un montón de aventuras y de personajes que lo ayudaron a encontrarse a sí mismo.
Había conocido muchos lugares, muchos personajes y todo ello le llevó a darse cuenta que con todo lo que había vivido podía ser contado.
El libro llegó a manos de sus lectores y empezó a contarse a sí mismo, todos sus lectores estuvieron muy entretenidos con él y lo encontraron muy interesante.
El tema principal es la libertad de cada uno para contar sus propias experiencias.
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